Por Valeria Estrada
Todos los días experimentamos un sinfín de emociones. Ya sea alegría, tristeza, inseguridad o calma, y afectan directamente nuestro estado de ánimo, cómo nos desenvolvemos con otras personas y las decisiones tomamos, por lo que al no saber controlarlas pueden desequilibrar nuestro alrededor.
Desde temprana edad se nos enseña a reprimir las emociones catalogadas como “negativas”; sentir tristeza, miedo, enojo, ira… Por lo general las reprimimos y guardamos dentro de nosotros como si fuesen algo que no debiéramos experimentar. Sin embargo, solo las acumulamos y tarde o temprano ocurre algo que las obliga a salir, e incluso con mayor intensidad.
Para poder entender y manejar nuestras emociones, es necesario pasar por un proceso de cambio e introspección donde nos preguntamos cómo es que lidiamos con ellas actualmente y qué acciones podríamos llevar a cabo para gestionarlas de manera más funcional.
Para facilitar este proceso es bueno crearnos hábitos para descargar nuestros sentimientos, como escribirlos en un diario o practicar algún deporte para liberar aquello que sea una carga. Incluso acudir con un especialista, ya que ellos son expertos en el tema y son de gran ayuda para desarrollar nuestra inteligencia emocional.
Recuerda que guardar nuestras emociones no hará que desaparezcan. Experimentarlas es necesario e inevitable, por lo que es nuestra responsabilidad entenderlas y manejarlas para llevar una mejor calidad de vida y mantener buenas relaciones con quienes nos rodean.
Copyright © 2016-2021 Funerales Jorge Serna Todos los Derechos Reservados