¿Cómo cerrar ciclos?

Por Mitzi Rosales 

La vida está regida por etapas, momentos, experiencias y emociones que llevan un proceso de inicio, desarrollo y final. Sin embargo, en ocasiones insistimos en quedarnos más tiempo del necesario en circunstancias que lejos de ayudar, nos causan daño y detienen nuestro progreso. Ya sea que hayamos experimentado el fin de una relación, el fallecimiento de un ser querido o tengamos que dejar un trabajo, es necesario reconocer y dejarlo ir para poder continuar el curso de nuestra vida.

Si bien, ponerle fin a estos ciclos requiere de esfuerzo, es necesario trabajar su cierre para no mantenernos atados al pasado. 

A través de la tanatología existen varias maneras de dar fin a estas etapas por medio de despedidas o rituales. Para comenzar puedes practicar estos cuatro pasos:

· Aceptar: Es el comienzo de todo. Sea tristeza, rabia, o agotamiento, es importante reconocer lo vivido aunque parezca difícil o queramos olvidarlo. La experiencia es algo que forma parte de nosotros y puede dejarnos grandes aprendizajes.

· Perdonar y perdonarte:  Libérate de culpas o sentimientos que te quitan energía y no te brindan calma. Permítete avanzar y ver la situación desde una perspectiva de amor y compresión. No te castigues, reconoce los errores y considera la parte humana que hay en todo.

· Soltar y déjalo ir: Escribe una carta donde plasmes los sentimientos que estás experimentando. El objetivo de ésta no es enviarla, es un escrito para ti, pues simboliza el dejar salir de tu organismo esas emociones guardadas para que dejes de cargar con ese peso extra.

· Resignificar: Darle un nuevo significado a lo vivido es replantearnos cómo ahora el acontecimiento toma un valor diferente a como lo vimos en un principio. Analizando lo ocurrido podemos encontrar una parte positiva que le otorga un sentido diferente al pasado. Esto es, cambiar nuestra perspectiva para sacar el máximo de cada momento.

Recuerda que los cambios externos simbolizan un proceso y una superación personal. A pesar de ser un capítulo complicado se trata de una vivencia que pondrá a prueba tu capacidad de resiliencia. Trabajar en ello te permitirá encontrarle una nueva forma de sentir la vida. Y no importa si te toma meses o más de un año, lograrás tomar una nueva dirección para continuar tus días con mayor fuerza y alegría.

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